Autores:
Categoría:
Cadera
Introduccion:
La infección protésica es una de las complicaciones más temidas en traumatología, con una epidemiología y un tratamiento no definidos.
Objetivos:
Realizar un estudio de serie de casos de la epidemiología y microbiología de las infecciones protésicas de cadera (IPC).
Material y metodología:
Se estudiaron 31 pacientes del H. U. Fuenlabrada (Madrid), intervenidos de prótesis total (PTC) o parcial de cadera (PPC) con implantes Corail (De Puy) como vástago y Pinnacle (De Puy) como implante acetabular. Se revisaron datos clínicos y microbiológicos. Se valoraron IPC entre los años 2008 y 2018, con realización de tanto la cirugía primaria y control posterior evolutivo en el mismo centro. Se definió infección aguda como aquella ocurrida en los primeros tres meses. Se ha realizado un estudio descriptivo de las características de la población a estudio y frecuencias. Los resultados se compararon utilizando χ2 y t de student.
Resultados:
Epidemiología: 29 pacientes fueron analizados. Un 64.3% mujeres, con una edad media de 74.9 años. El IMC medio fue 30.1. El tiempo de ingreso medio fue 36.6 días. Microbiología: Un 60.7% de las infecciones fueron agudas, con una PCR media al diagnóstico de 8.5. Los cultivos resultaron positivos en un 85.7% de los casos, siendo los gérmenes más frecuentes S. Aureus (21.4%), S. Epidermidis (17.9%) y E. Coli (14.3%). Las infecciones secundarias a S. Aureus presentaron valores más elevados de PCR (p = 0.029). Antibiótico: Vancomicina (39%), Quinolonas (39.3%), Trimetoprim-Sulfametoxazol (28.6%) y Meropenem (21.4%) fueron los antibióticos más frecuentes. Se asoció Rifampicina en un 28%. El tiempo antibiótico medio fue de 34.7 días de tratamiento iv y 71.5 días de oral. Se encontró correlación entre la edad del paciente y la necesidad de tratamiento supresor (p < 0.05). El tratamiento supresor se realizó con Trimetoprim-Sulfametoxazol (57.2%) o Quinolonas (42.8%).
Conclusiones:
Los resultados del estudio muestran una incidencia más de gérmenes más agresivos y con resistencias (SARM) y necesidad de añadir tratamientos supresores, secundario al envejecimiento de la población.