Autores:
Categoría:
Cadera
Introduccion:
Los mecanismos de detección de déficit de vitamina D al ingreso, la administración de suplementos de vitamina D y la optimización de la ingesta de calcio, están orientados hacia la reducción del riesgo de nuevas fracturas por fragilidad o refractura.
Objetivos:
El objetivo de este estudio es analizar si el tratamiento con Vit D al alta, reduce el riesgo de segunda fractura osteoporótica, en los pacientes intervenidos en nuestro centro por fractura de cadera, con diagnóstico de déficit de vitamina D al ingreso (Vit D <30).
Material y metodología:
Se revisa retrospectivamente 207 pacientes, >65años, con déficit de vitamina D al ingreso, intervenidos por fractura de cadera en nuestro centro, entre abril de 2015 y octubre de 2018. Se dividieron en dos grupos en función del tratamiento con vit D al alta. Se analizaron como variables explicativas: edad, sexo, Barthel y tipo de fractura. Como variable resultado la tasa de segundas fracturas tras un seguimiento mínimo de 6 meses. Se analizó la capacidad de protección del tratamiento de vit D al alta mediante el Riesgo Relativo (RR). Para valorar la capacidad de discriminación de los valores de vit D al ingreso se midió el área bajo la curva ROC, para la aparición de segundas fracturas.
Resultados:
Se registraron 6 fracturas osteoporóticas en 207 pacientes (2,8%). Todas las nuevas fracturas se produjeron en pacientes mayores de 80años con lifopenia. Cuatro de las seis nuevas fracturas se produjeron tras fracturas subcapitales. En cuanto a la distribución por grupos, se registraron 4 (3,2%) en el grupo con tratamiento con vit D al alta (Grupo A: N=125), y 2 (2,4%) en el que no llevó tratamiento (Grupo B: N=82). El RR de tener una segunda fractura osteoporótica fue de 1,3 en el Grupo A. El área bajo la curva fue de 0,472 para la aparición de nuevas fracturas osteoporóticas.
Conclusiones:
No detectamos capacidad de protección del tratamiento de vit D al alta frente a la aparición de segundas fracturas osteoporóticas y la vitamina D al ingreso, no tiene una capacidad de discriminación aceptable para la aparición de segundas fracturas osteoporóticas, en los pacientes con fractura de cadera en nuestro entorno.